El papa Francisco donó 500.000 dólares para ayudar a los migrantes en México, ofreciendo asistencia a proyectos locales que ofrezcan comida, alojamiento y cobertura de necesidades básicas. Con esto da una señal hacia la migración y la posición de la Iglesia.
Los fondos, procedentes de las colectas del Óbolo de San Pedro, se repartirán entre 27 proyectos auspiciados por 16 diócesis y congregaciones religiosas mexicanas, indicó la institución caritativa vaticana en un comunicado.
Miles de migrantes han llegado a México en los últimos meses, viajando a pie o en vehículos improvisados desde Honduras, El Salvador y Guatemala. Pero no han podido cruzar la frontera con Estados Unidos. La ayuda va dirigida en particular a la asistencia para más de 75.000 personas que llegaron a México en 2018 en seis caravanas migrantes. «Todas estas personas quedaron varadas, sin poder entrar en Estados Unidos, sin hogar ni medio de vida», dijo el comunicado.
