Durante la mañana de este jueves 19 de noviembre, se dio a conocer la renuncia de Mario Rozas como General Director de Carabineros, a un día de que efectivos policiales balearan a dos niños al interior de un centro del SENAME.
Creemos que la salida de Rozas era un imperativo mínimo de justicia, luego de casi dos años de violencia y represión sistemática hacia el pueblo, además del clima de impunidad instaurado en torno a las violaciones a los DDHH no solo durante este último estallido social, sino que desde el periodo de dictadura. A pesar de eso, sabemos que esto no cambia la raíz del problema que presenta la institución, sino que esta respuesta es tardía e insuficiente. Lo que nuestro país, los niños, niñas y adolescentes, y las y los presos políticos necesitan, es un proceso que repare y genere justicia por la responsabilidad política de Rozas en todos los hechos de violencia policial.
Además, creemos necesaria una refundación completa de la institución que se ha caracterizado por violar DDHH, por ocultar la verdad y por incurrir en millonarios robos y casos de corrupción.
Una nueva institucionalidad debe poner en el centro el respeto irrestricto de los derechos humanos, una formación humana y que esté al servicio del pueblo.
Partido Comunista Intercomunal Los Andes.
